Una broma muy embromada.

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Las bromas del día de los inocentes son muy populares y muchas de ellas demasiado pesadas o de mal gusto. Esta es la historia de lo que tal vez sea la broma más original y conocida de todas.

Oliver Bickar, alias Porky vivía tranquilamente en Sitka haya por el año 1971, un pueblo y distrito de Alaska a los pies del volcán Edgecumbe (dormido desde hace casi 4000 años). Era un cincuentón acostumbrado a hacer bromas pesadas como plantar un enorme árbol en la puerta de la casa de uno de sus amigos, entre otras.

Ese año se le ocurrió la que seria la broma de su vida que consistía en hacer que el volcán que dominaba el pueblo hiciera erupción. El eje de su plan consistía en hacer acopio de neumáticos viejos y esto le tomo tres años.

Cuando tuvo suficientes intento alquilar un helicóptero para llevarlos a la sima. En Alaska no hay muchas carreteras por lo que el transporte aéreo es muy común y las pequeñas empresas aéreas abundan, pero ninguna quiso ayudarlo por lo que tuvo que recurrir a un amigo suyo que tenía un helicóptero. Este amigo, tan bromista como el no encontró inconveniente en ayudarle; a éste se le sumaron un par de compinches más ya que la logística hacía imposible realizar la broma ellos dos solos.

El día elegido fue el primero de abril (de 1974), que es el equivalente a nuestro 28 de diciembre (día de los inocentes). Llevar los neumáticos les tomo varios viajes de helicóptero, además de unos cuantos litros de alcohol en gel, bombas de humo y muchas latas de combustible. Entre viaje y viaje Oliver escribía en la nieve con pintura en spray y con letras de varios metros de ancho   “APRIL FOOL“, cuando tuvo la “montaña” de neumáticos pronta con el combustible y el alcohol en gel, la encendió.

Imagen. Ubicación de Sitka en Alaska.

El humo negro comenzó a subir y rápidamente fue visto en el pueblo asustando a la gente del lugar que salió a las calles temiendo lo peor. Oliver había notificado a la Agencia Federal de aviación sus intenciones y estas no le habían hecho ningún problema, pero no dio aviso a la policía local ni la guardia costera quién envió un helicóptero al lugar, el cual se encontró al sobrevolar a la sima con la hoguera de neumáticos y la leyenda “APRIL FOOL“ escrita en la nieve.

A pesar que las autoridades no compartieron el humor de Oliver y sus amigos la cosa no paso a mayores. Sus vecinos por suerte se lo tomaron a bien y después del susto perdonaron a su vecino.

Aparentemente en 1981 el volcán Edgeumbe tuvo una pequeña “tos” (erupción) que no paso a mayores pero fue suficiente como para que un vecino de Oliver le dejara una nota en la puerta que decía  “Esta vez has ido demasiado lejos hombre”.

Fallece en el 2003 con el honor de haber hecho tal vez la broma más impresionante que alguien ha realizado y de hacer conocida a su pequeña ciudad ya que la noticia de la broma recorrió el mundo.